Hoy te quiero compartir el camino al éxito espiritual y cómo El Eterno Dios se manifiesta en aquellos que verdaderamente siguen le siguen. Es importante destacar que ser cristiano no se trata solo de creer en Yeshúa, sino de seguir Sus pasos y obedecer Su voluntad. Muchas personas asisten a la iglesia, oran y rezan, pero un verdadero cristiano es aquel que sigue la voluntad del Señor y se niega a sí mismo.
La diferencia entre creer y seguir para alcanzar el éxito espiritual
La diferencia fundamental entre un verdadero cristiano y un simple creyente radica en que el cristiano es un seguidor de Yeshúa. Para ser un seguidor, uno debe manifestar lo que llamamos el «Triarmónico del Éxito», que se manifiesta de tres maneras en la vida del cristiano: verdad revelada, proclamación y obediencia. Estos tres componentes son esenciales para que el cristiano tenga éxito en su vida espiritual. Si falta alguna de ellas, el cristiano estará en problemas.
Verdad Revelada: La verdad revelada es la manifestación del conocimiento oculto del Eterno. Es cuando Dios decide mostrarse de diferentes maneras y formas a las personas. La verdad revelada es esencial para que nuestras oraciones sean efectivas (Santiago 5:16). Confesar nuestras ofensas unos a otros y orar unos por otros nos sana y nos ayuda a fortalecer nuestra vida en comunidad.
Proclamación: Proclamar la verdad del Eterno Dios es vital para nuestro desarrollo espiritual, Yeshúa mismo lo dijo en Lucas 4:21. La proclamación constante de Su palabra es esencial para que los cristianos podamos comprender nuestro propósito y misión en la vida. Para ello debemos leer, conocer y estudiar las Escrituras, ya que en ella encontramos la palabra profética más segura (2 Pedro 1:19).
Obediencia: La obediencia a la Palabra de Dios es crucial. La Biblia nos dice que debemos orar sin cesar (1 Tesalonicenses 5:17) y pedir según Su voluntad (Mateo 6:10). Una oración eficaz es aquella que se hace conforme a la voluntad del Eterno Dios. Si oramos fuera de Su voluntad, nuestras oraciones no serán respondidas.
La Importancia de la Oración Eficaz
La oración eficaz es fundamental en la vida del cristiano, por esto Yeshúa nos enseñó a orar (Mateo 7:7). Debemos aprender a pedir a Dios con fe y según Su voluntad. La oración no se trata solo de pedir, sino de mantener una relación continua con el Creador. Debemos orar sin cesar y dar gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para nosotros (1 Tesalonicenses 5:18).
Es crucial entender que nuestra oración debe mover montañas, como lo enseño El Maestro en Mateo 17:20. La fe y la oración eficaz pueden lograr grandes cosas. No debemos intentar hacer el trabajo de Dios por nosotros mismos, sino confiar en Él y en Su poder.
Conociendo la Voluntad de Dios
Para que nuestra oración sea eficaz, debemos conocer la voluntad del Eterno Dios. La verdad revelada nos muestra cuál es Su voluntad para nuestras vidas. Cuando entendemos la Palabra de Dios y Su propósito para nosotros, nuestras oraciones se alinean con Su voluntad. Yeshúa conocía las Escrituras y vivió conforme a ellas. En Lucas 4, El Mesías leyó una porción del libro del profeta Isaías y proclamó que la escritura se había cumplido en Él. Conocía Su propósito y misión porque entendía la verdad revelada en la palabra de Dios.
Debemos buscar la verdad revelada en la Biblia y no depender de profecías humanas que contradicen la palabra de Dios. La Biblia es la palabra profética más segura y debemos confiar en ella. El Eterno Dios puede revelarse a través de hombres y mujeres, pero cualquier revelación debe alinearse con la Biblia.
Actuar Conforme a La Palabra
Finalmente, debemos actuar conforme a la palabra de Dios. Yeshua actuó según lo que la Profecía decía de Él, habitando en la tierra donde debía estar, y compartiendo con las personas que debía compartir (Mateo 4:13-14; 15:24). De la misma manera, nosotros debemos vivir y actuar conforme a la Palabra del Creador, buscando siempre Su voluntad y siguiendo Su dirección.
En resumen, el Triarmónico del Éxito en la vida del cristiano se manifiesta en la verdad revelada, la proclamación y la obediencia. Debemos orar eficazmente, conocer la voluntad del Eterno Dios y actuar conforme a Su Palabra para vivir una vida plena y exitosa en Yeshúa, nuestro Mesías.
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